
Tailandia crecerá significativamente más lento que sus vecinos de la región en 2025. La principal causa es la débil demanda interna debido a una deuda doméstica excepcionalmente alta. Los hogares gastan menos, las empresas invierten con mayor cautela y la confianza sigue siendo frágil. Factores externos adversos, como la fortaleza del baht y los nuevos aranceles estadounidenses, están agravando la situación. El gobierno intenta impulsar la demanda con un plan de copagos, pero se necesita un alivio estructural de la deuda para ganar impulso real.